Para
12 cupcakes + 1 bizcocho de 15 cm
Para el bizcocho:
200 gramos de azúcar
200 ml de aceite de girasol
200 gramos de harina
2 cucharadita de cacao
2 cucharadita de levadura
4 huevos
Ralladura de media naranja
Zumo de media naranja
Para la mermelada:
Para la mermelada:
100 gramos de pulpa de naranja
100 gramos de azúcar
Zumo de limón
Para el ganache:
Para el ganache:
200 ml de nata para montar
50 gramos de azúcar
Piel de media naranja
200 gramos de chocolate negro para postres (70%)
Preparación
Precalentamos el horno a
180º (con calor arriba y abajo).
Batimos el azúcar con el
aceite hasta que esté bien integrado.
Por otro lado, tamizamos la
harina con el cacao y la levadura.
Añadimos los huevos uno a
uno a la mezcla de azúcar y aceite, batiendo después de cada adición.
Incorporamos la mezcla de
harina y batimos hasta obtener una pasta homogénea.
Por último, añadimos la
ralladura y el zumo de naranja y mezclamos bien.
Ponemos las cápsulas en la
bandeja, repartimos la masa con ayuda de una cuchara para helados y horneamos
unos 25 minutos a media altura.
Pasado este tiempo sacamos
la bandeja o molde del horno y dejamos enfriar, primero en la propia bandeja o
molde y después sobre una rejilla.
Para la mermelada:
Ponemos la naranja en un
cazo a fuego medio-alto junto con el azúcar y un poco de zumo de limón, sin
parar de darle vueltas.
Cuando haya soltado el agua
y se haya disuelto el azúcar, dejamos unos 20 minutos a fuego medio, removiendo
de vez en cuando.
Pasado este tiempo, lo
quitamos del fuego y dejamos templar.
Para obtener una mermelada
más fina, podemos triturarla.
Para el
ganache:
Ponemos la nata en un cazo
a fuego medio junto con el azúcar y la piel de naranja.
Cuando empiece a hervir,
quitamos del fuego y añadimos el chocolate troceado, removiendo hasta que esté
todo bien integrado.
Dejamos enfriar a
temperatura ambiente hasta que adquiera la consistencia deseada, quitando la
piel en el último momento para que absorba bien el sabor.
Para el montaje y la
decoración:
Cuando los cupcakes se
hayan enfriado quitamos el centro con ayuda de un descorazonador.
Rellenamos con un poco de mermelada de naranja y lo volvemos a poner.
Cubrimos con el ganache de
chocolate con ayuda de una manga pastelera y decoramos con sprinkles de
colores.